Origen militar de la Heráldica

alfonsoix - Origen militar de la Heráldica

Hablar de heráldica militar supone remontarnos a los orígenes de la propia heráldica como el arte de explicar y describir los escudos de armas de cada linaje, ciudad o persona; es decir, la ciencia que surge en torno a unos guerrilleros que precisaban identificarse en el combate por sus escudos de armas. Precisamente, su aparición se debió a la evolución del equipo militar entre finales del siglo XVI y la primera mitad del XII.(1)

Nació así esta ciencia, de la necesidad de diferenciarse en medio de una uniformidad de armaduras en combate, y como referencia de mando y cohesión.

Van surgiendo, sucesivamente, señales distintivas en forma de dibujos y colores que representan al portador cuando se llevan en las zonas más visibles del caballero o de la montura, como son las prendas de la cabeza, los escudos defensivos, etc.

No obstante, ya en el siglo VII se le atribuye a Don Pelayo el uso simbólico del león de gules en campo de plata que, en realidad, no comenzó a usarse hasta cuatro siglos después.

Alfonso VII, rey de León y Galicia, el rey que le concedió la ciudadanía a A Coruña y vivió a caballo de los siglos XII y XIII, usaba únicamente las armas de León, como se puede ver en el tumbo A de la catedral compostelana.

Pero no solamente los reyes, sino también sus representantes en el reino galaico utilizaban el mismo signo heráldico, como mostraba un sello en el desaparecido tumbo de Mondoñedo, perteneciente al meiriño maior de Galicia en 1261 (2). Esta dependencia de la monarquía leonesa hace pensar que Galicia, y en consecuencia sus militares, carecerían de símbolo heráldico propio entre los siglos XII y XIV.

Simultáneamente, estos símbolos distintivos se debían enarbolar en alto, como referencia  de identificación, de reunión y de mando; surgen entonces las banderas, en todas sus acepciones, con similares símbolos.

Nace así la heráldica: cuando ya existían el casco de cabeza y el escudo de brazo protector como armas defensivas utilizadas en todo tipo de enfrentamientos, tanto en combate como en justas y torneos.  Comienza a aparecer pues, la heráldica, como una obligación impuesta por la imperiosa necesidad de distinguir los bandos contendientes, y cuando se utilizaba el concepto militar de “reunirse” para el combate formando unidades guerreras.

(1) Gaspar Massó, Pedro Madruga de Sotomayor, Caudillo Feudal, Ed. Bibliófilos Gallegos, Santiago de Compostela, 1975.

(2) Jaime Bugallal y Vela, Origen y evolución de las Armas de Galicia, Instituto Salazar y Castro (C.S.I.C.), Hidalguía, Madrid, 1981.

Comparte este post

Carrito de compra
Scroll al inicio